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Economía Mágica

Si tienes conocimientos de Alta Magia, así como de algunas tradiciones mágicas más herméticas, sabrás que sus herramientas de trabajo son muy específicas, costosas y difícilmente pueden reemplazarse. Por suerte, para aquellos que practicamos diversos estilos de brujería tradicional, brujería verde o de cocina -entre otras ramas-, tenemos la fortuna de que las herramientas pueden ser un poco más flexibles, lo cual es bastante bueno para nuestros bolsillos. 

Es muy importante que tomen en cuenta lo siguiente: de ningún modo estamos diciendo que no deban conseguir sus herramientas o que menosprecien su labor usando baratijas; sino que muchas veces la experiencia te enseña que para fines prácticos es una excelente idea improvisar un poco, especialmente si nos encontramos en una situación de apuro o estamos lejos de nuestro amado altar. 

Dejando este punto en claro, comencemos:

Athame: Suele ser una de las herramientas más difíciles de conseguir, sin embargo, podemos encontrar una manera muy común de realizar magia sin necesidad de tener uno. La recomendación es hacer uso de nuestro dedo índice de la mano proyectiva, es decir, la mano que usualmente utilizamos para escribir. Por otra parte, es posible encontrar personas que utilizan Athames de madera, sin embargo, hay corrientes mágicas que reprueban totalmente esto, pues el Athame representa al elemento Fuego, y el Pentáculo es quien debe representar el elemento Tierra (madera), pero a final de cuentas, esto queda a decisión del mismo practicante.

Aspersorio: Durante algunos rituales, especialmente los de purificación de círculos de poder, es una práctica común rociar agua consagrada con ayuda del aspersorio (muy similar a como se acostumbra en la iglesia católica). Al ser una herramienta no tan común, también existe dificultad para encontrarla y su costo suele ser elevado. Una manera de reemplazarlo puede ser simplemente usar una ramita de nuestra hierba favorita (o de aquella que guarde correspondencias con nuestro ritual), simplemente debemos sumergirla un poco en el agua consagrada y usarla para rociar el espacio sagrado. Incluso hay personas que también hacen uso de su mano proyectiva, sumergiendo los dedos y usarlos para salpicar.

Báculo: Esta herramienta no es tan usada en tradiciones wiccanas, siendo su uso más común en el druidismo; aún así, es perfectamente aceptable su uso en la brujería en general. Conseguirlo en tiendas suele ser caro e incluso complicado, la recomendación es conseguirlo directamente en la naturaleza, cada practicante podrá decidir su decoración y uso. Aunque generalmente se maneja para la creación de círculos mágicos, también es un simbolismo del Dios.

Bolline: Es el cuchillo curvo de mango blanco usado para cortar hierbas, también suele usarse para dibujar sigilos en las velas encantadas. Su uso suele estar más inclinado a la magia ritual. Como alternativa para cortar hierbas, hay practicantes que usan pinzas pequeñas de jardinero en su lugar. En el caso que se requiera dibujar sigilos en velas, se puede usar la opción de espinas o palillos de madera.

Caldero: Una de las herramientas más deseadas por todas las brujas, representa lo femenino y el elemento Agua. Lamentablemente hoy en día es difícil de conseguir si nos encontramos lejos de tiendas especializadas. Por fortuna, en la brujería tradicional latinoamericana, así como en la brujería de cocina, se suele reemplazar con ollas de peltre, solo debemos asegurarnos que su uso sea exclusivamente para nuestros trabajos mágicos.

Cáliz: Básicamente se trata de una copa ritual en donde podemos verter agua o vino, al igual que el caldero, representa lo femenino y al elemento Agua. Es posible encontrar gran variedad de esta herramienta, tanto con acabados súmamente delicados, como aquellos de aspecto más gótico, sin embargo, en caso de que aún estemos iniciando nuestro sendero y no podamos hacernos de uno, es posible comenzar con una simple copa de vino.

Campana: Su uso dentro de la Wicca no es una regla de oro, pero puede usarse para alejar negatividad del lugar antes de realizar cualquier tipo de trabajo mágico, también puede ser usada para llamar a los Atalayas o algunas deidades. Existen de metal o cristal; no hay problema el tipo de material que usemos, siempre y cuando su sonido nos sea agradable y nos permita trabajar sin distracciones o incomodidad.

Incensario: Hay opciones de incensarios metálicos muy hermosos, pero caros. Por suerte para nosotros, en casi cualquier tienda de autoservicio podemos encontrar una pequeña tablilla para incienso en vara, incluso un pequeño plato sirve para quemar incienso artesanal.

Escoba: Hay escobas de distintos precios en tiendas especializadas, sin embargo, el problema viene al momento del envío, pues no muchas paqueterías aceptan artículos tan grandes, o en su defecto, el envío suele salir más caro que el producto mismo. Podemos poner manos a la obra para crear nuestra propia escoba, pero si las manualidades no son lo nuestro, entonces podemos echar un vistazo a los artículos de Halloween, donde es posible hallar bellas escobas. Hay brujitas que también hacen uso de escobetillas para el altar.

Mortero: Hoy en día existen morteros mecánicos que permiten hacer el trabajo más rápido, aunque la tradición dicta que lo ideal es usar del tipo tradicional. Los hay de cerámica o madera, incluso de cuarzo, también es posible reusar los morteros de los frascos de especias que venden en cualquier supermercado. La única condición es que su uso sea exclusivo para el trabajo mágico, pues algunas veces podemos hacer uso de hierbas tóxicas para el consumo humano y debemos evitar posibles intoxicaciones.

Plato de ofrendas: En tiendas especializadas podemos encontrar platos especiales para altares, algunos muy hermosos con motivos grabados o pintados. Pero si el costo supera nuestro bolsillo, también podemos recurrir a un plato de cerámica nuevo, o bien, podemos hacerlo de arcilla. La imaginación será el límite para crear un plato a nuestro gusto.

Tambores: De origen inicialmente chamánico; es otra herramienta que si bien no es Wicca, podemos utilizar sin problema. Nos ayudará a entrar en trance durante rituales. No es común encontrarlos en tiendas esotéricas; siendo más probable hallarlos en festivales Asatrú o de chamanismo, algo a lo cual no todos tienen acceso comúnmente. Existen tutoriales para fabricarlos con piel, sin embargo es una opción que no a todos agrada. Hay practicantes que improvisan con latas grandes y vacías, ya sea de metal o de cartón rígido. Podemos decorarlo a nuestro gusto para sentir una mayor conexión con nuestra creación.

Tela de altar: No necesitas gastar mucho dinero en tiendas especializadas. Si eres una persona creativa, puedes decorar tu propio mantel con los simbolismos que desees. Otra opción válida es el uso de telas como satín o terciopelo, en temporada de Samhain hay diseños muy curiosos y que podemos adaptar sin problema. Incluso hay quienes usan mascadas bellamente decoradas que podemos encontrar en cualquier tienda de ropa.

Varita: Es quizá el elemento más fácil de conseguir, pues muchas veces solemos usar ramas que encontramos tiradas en algún parque o jardín, es tan simple como lijarla y si se desea, también podemos decorarla. Algunas brujas de cocina optan por usar cucharas de madera para suplir la vara. Además, de la misma forma que el Athame, podemos utilizar nuestro dedo índice para indicar el movimiento de energía deseado.

Ahora bien, no hay pretexto para iniciar en este bello camino. Solo es cuestión de tener un poco de paciencia para conseguir todo lo que necesitamos. Esperamos que esta guía haya sido de ayuda para las brujitas nuevas que nos hacen llegar sus preguntas vía inbox.